viernes, 12 de agosto de 2011


Reintégrenme el color que habitaba en los sueños,
Yo puedo dar un centenar de pesadillas.
Que son aquellas que dan luz a mi desdeño,
Y quieren empujar un sol que trastabilla.
Y que el futuro sólo sea incertidumbre
Y no la lumbre que amplifique así mi miedo.
Y no la nube que me impida ver el cielo.
Que me devuelvan las sonrisas espontáneas
Que, yo a cambio, puedo dar mi escepticismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario